Papás y mamás,
se acercan las vacaciones de verano y seguramente muchos de vosotros os iréis de viaje, otros os quedaréis en casa con vuestros hijos o éstos se quedarán a cargo de un familiar.
El verano suele ser tiempo de libertad, en el que se rompen reglas y costumbres. Esto genera alegría en los niños y desesperación en los padres. Seguro que en ocasiones os preguntaréis si os estáis pasando en la manera de educar a vuestros hijos, si esta forma de hacer les perjudica o si después del verano podréis volver de nuevo a la rutina.
Aquí os queremos dejar algunos consejos para que no olviden los hábitos y rutinas adquiridos durante este curso y algunas actividades con las que podréis disfrutar juntos padres, madres e hijos.
- Podéis crear una agenda de vacaciones donde anotéis actividades para realizar juntos así como algunas de las rutinas que llevaréis a cabo.
- Dividid las tareas durante la semana: es más recomendable realizar las tareas escolares por la mañana, y por la tarde realizar actividades caseras o de ocio. Además, podéis iniciarles en la colaboración de las tareas del hogar con la realización de tareas como emparejar los calcetines, recoger sus juguetes y ordenar su habitación o poner la ropa en el cesto de la colada. De esta manera los niños aprenden a ser limpios y ordenado en el ámbito familiar y, posteriormente, extenderán esa conducta al ámbito escolar.
- Elaborad un menú divertido para las comidas en familia, donde podáis involucrar a vuestros hijos en su elaboración. Procurad comer cada día a la misma hora.
- No dejéis de jugar nunca con vuestros hijos. Los niños tienen una imaginación alucinante, seguro que cada día podréis crear una historia diferente.
Esperamos que nuestros consejos hayan sido de ayuda!